miércoles, 2 de febrero de 2011

Que no te den gato por liebre

Esta curiosa expresión tiene un origen culinario.

Aunque os cueste creer el gato es tan comestible como cualquier otro animal, y de hecho mucho más barato que la liebre, he ahí el timo, en el arroz o en la parrilla, que no os den gato por liebre